jueves, 9 de octubre de 2008

Casanova, qué gran hombre. Libertad, qué gran palabra

Tan grande que puede que no tengamos ni idea de lo que conlleva en sí misma. Muchas veces pienso que la libertad no es tan buena como la pintan. Realmente esto de elegir es una putada… podemos elegir bien, o podemos no hacerlo. Quiero decir creo que la libertad esta sobrevalorada.

Desde pequeños no enseñan unos conceptos con un valor dogmático. La libertad es buena, la tacañeria mala (por poner un ejemplo) pero… ¿realmente todo es tan bueno o tan malo como lo pintan?. Si lo piensan con frialdad la autonomía es una mierda, es la mayor condena del hombre “Desgraciados humanos que son esclavos de su propia libertad” [No se donde coño escuche esto, de echo no estoy seguro de que no halla salido de este vertedero que tengo por cabeza…]

Lo que intento decir es simple, imaginemos un mundo en el que cada uno tuviese que hacer lo que unica y exclusivamente tiene que hacer, en plan colmena de abejas. Un mundo en el que cada uno tuviese una vida lineal en la cual no pudiese elegir nada, una vida sin libertad… horroroso pensarian algunos, una vida en la cual no tuvieses decepciones porque sabes que nunca fracasaras, una vida en la cual cada uno siempre va por el camino que debe ir, una vida en la cual cada uno se realiza por el hecho de ser lo que es, una vida sin lucha, sin sufrimiento…

Se que realmente me tratareis de loco o incluso de gilipollas, se supone que esto es algo básico. Se supone que esta cuestión es de niño de 4º curso. Se supone…

Una vez escuche que los realmente filosofos son esos niños que no tienen prejuicios y se sorprenden con todo lo que les rodea como si fuese la 1º vez que lo ven. ¿Saben por qué? Porque todavia no tienen esas mierdas en la cabeza de que la libertad es buena o la libertad es mala. Piensan por ellos mismos, y aunque esten equivocados, son autenticos y no toman una verdad como supuesta.

Por una vez seamos niños… ¿Por qué ansiamos la libertad?
..

3 comentarios:

distante.espejo dijo...

la respuesta es sencilla, corsario de altos mares, ansiamos la libertad porque no sabemos que tenemos el privilegio de hacer lo que nos dé la gana.

no lo sabemos, o mejor dicho no lo aplicamos, nos dejamos arrastrar por conceptos ajenos, vamos [ca]yendo en picado, tomamos las cosas y las desechamos al instante. y ahí, en este contexto, libertad es un agujero en el argumento en que siempre cabe toda agonía, todo dolor, toda tristeza.

Eudemo dijo...

La libertad es el principio fundamental de la infelicidad. Y así como la abeja no elige recolectar polen, el hombre no escoje su libertad. Sin embargo, hay algo, más allá de la educación recibida, que nos empuja a la libertad, que nos pone ante ella, que nos incita a buscarla, a necesitarla, a negarla, defenderla, pisotearla...el hombre es en esencia libre como es en esencia recolectora de polen la Abeja. Y quien te dice que, como a ti te preocupa esa condena a la libertad, a la abeja no le preocupa esa condena eterna a la producción de miel?

Eudemo

Anónimo dijo...

La abeja no es libre ni le preocupa la condena a la recolección de la miel, ya que no puede plantearse otra cosa. El hombre tiene miedo a la libertad porque entonces es responsable de sus actos. Nadie te va a decir nada si haces algo que normalmente es considerado como malo si no eres libre para elegir, en cambio, si sí lo eres, atente a las consecuencias. Nos da miedo que nos juzguen los que no son libres para no juzgar.